Tras un sacrificio supremo y hacer un pacto con Shatán para caer en el plano del Olvido, Dekkar’iël será golpeado, acosado y ultrajado hasta la saciedad por los primeros nefilims de la Creación, los titanes.

Nuestro ángel de la guarda ha perdido la memoria y debe buscar a la titánide Mnemosine para que le ayude a recordar quién es y por qué emprendió este periplo, máxime para escapar de un plano donde prácticamente todo el mundo quiere capturarlo para dar rienda suelta a sus más bajos instintos.

La Celda de los Titanes, es el segundo acto de un viaje por amor, a lo más profundo de los pozos de la desesperación, para alcanzar la redención y la libertad de quien dio vida a la leyenda del amor impío.

Reseña 85. En enero de 2017 publiqué la reseña de la primera parte de «El periplo del ángel» y realmente fue una suerte que el autor me tuviese en cuenta para reseñarla. Hoy ha llegado el día de dar mi opinión sobre la segunda parte de las aventuras de Dekkar’iël.

De nuevo me he encontrado con una novela corta, de algo más de 100 páginas por lo que se puede leer en un abrir y cerrar de ojos y más gracias al estilo ameno de su autor. Por otro lado, me encanta el nivel imaginativo que despliega. Realmente sus palabras son capaces a transportarme al escenario de las aventuras de Dekkar’iël y los distintos personajes con los que interactúa son una fuente inagotable de buenas escenas.

Por otro lado, en esta ocasión se trata de una novela donde la erótica ha ganado más importancia en detrimento de la vertiente más fantástica, que también tiene su importancia, pero que prima sobre todo las escenas eróticas y el problema que siempre encuentro en este tipo de escenas es que al final son repetitivas y fácilmente adivinables. La suerte de esta novela es el escenario en el que desarrolla y que Dekkar’iël es un gran personaje, lo suficientemente fuerte como para mantener el interés por su desarrollo a lo largo de estas dos novelas y del que espero una tercera entrega.