¿Cuál es su significado?

Es un refrán. Se refiere a la ingratitud de aquellas personas que, debiéndonos grandes beneficios, los olvidan o los pagan con injustas acciones o molestas palabras.

Origen

Antiguamente se decía en singular: Cría el cuervo, y sacarte ha el ojo.

No tiene un origen conocido. Lo de criar cuervos ha sido costumbre de todos los tiempos. Puede ser que se base en algún hecho real o que solamente sea un símbolo.

Vicente Vega, en su Diccionario de anécdotas (Barcelona, 1956), refiere lo siguiente (anécdota 1.729):

«Entre las muchas cosas que se cuentan, dícese que, en cierta ocasión, el célebre condestable de Castilla don Álvaro de Luna, encontrándose de caza, acompañado de varios nobles, hubo de fijar su atención en un pobre hombre falto de vista, pues en lugar de sus ojos presentaba dos horribles cicatrices que habían desfigurado por completo su rostro.
»—¿Has estado en alguna guerra? —preguntó don Álvaro al viejo.
»—Señor, mis heridas no las recibí en combate alguno; me las hizo un desagradecido…
»—¡Qué miserable!… —exclamó el de Luna—. ¿Y quién fue el mal nacido…?
»—Tres años ha criaba yo un cuervo que había recogido pequeñito en el monte, y le traté con mucho cariño; poco a poco fue haciéndose grande, grande… Un día que le daba de comer saltó a mis ojos, y por muy pronto que me quise defender fue inútil: quedé ciego.
»Don Álvaro socorrió largamente a aquel desdichado. Y con amarga ironía dijo a sus compañeros de caza:
»—Ya habéis oído, caballeros: criad cuervos para que luego os saquen los ojos».

Vicente Vega termina esta historia, preguntándose: «¿Será este, en efecto, el origen de la mencionada frase proverbial?».

No se sabe si es el origen, aunque se cree que en tiempos del condestable ya se decía ese refrán.

Fuente: El porqué de los dichos (José María Iribarren)